Después de la pandemia hemos visto nuevas apuestas en la arquitectura y el interiorismo, donde las formas orgánicas y curvas reaparecen; cada vez más se habla en los manifiestos de tendencias cómo la arquitectura orgánica ofrece confort y bienestar.
Existe una relación directa entre las formas curvas y la naturaleza, convirtiéndose en una filosofía de arquitectura orgánica que promueve la armonía entre el hábitat humano y el mundo natural.
Las líneas curvas son un recurso que rompen con la monotonía de un mundo “cuadrado” y contribuyen a la creación de proyectos alegres, dramáticos e impresionantes con un gran valor artístico.
Las formas curvas son una tendencia creciente no solo en la arquitectura denominada “Blobitectura”, un término que se conoce desde mediados de los 90 con experimentos de diseño digital que expresa una arquitectura disruptiva de líneas redondas y envolventes, por el arquitecto Greg Lynn…
En el interiorismo la tendencia “Bold” se manifiesta con nichos, arcos, muros y mobiliario curvilíneos que eliminan todo tipo de ángulos y tensiones en los espacios para lograr la fluidez y el dinamismo que nos aporta la arquitectura “blob o Blobitectura.
Así, desde todas las disciplinas y expresiones del diseño, las formas redondeadas entran a nuestros nuevos entornos para crear ambientes más amistosos, confortables y dialogantes…
Piezas clave que enriquecen esta tendencia: formas curvas
En arquitectura
Paredes curvas, arcos, elementos estructurales redondeados, escaleras circulares y elementos escultóricos que le aporten armonía visual a la arquitectura.
En mobiliario
Sofás, sillas, mesas de centro y puff con líneas sinuosas. De espaldares y reposabrazos redondeados son las piezas que encajan perfecto en la nueva arquitectura orgánica.
En elementos decorativos y textiles
Espejos, lámparas, esculturas, vajillas, cortinas, cojines y alfombras, se visten de patrones suaves y redondeados para darle el toque final a los espacios que se crean con esta nueva tendencia.
Colores y materiales
Tonos suaves pasteles y terrosos, juegan muy bien con colores verdes botánicos para acentuar perfectamente el concepto natural y orgánico a esta tendencia.
Así mismo, los materiales nobles como madera, metal, concreto y vidrio encabezan el listado de opciones para crear y desarrollar ideas que se acojan a esta nueva tendencia de formas curvas.